Rammstein -
Mein Herz Brennt (Mutter)
"Te
falta sangre" me decían. Y la verdad es que un poco sí que me faltaba, sí.
Pero no sé en qué momento pude ver el fútbol de otra manera. Ya no era aquel
crío que prefería estar en el banquillo y le daba miedo salir al campo. Aquel
Cánovas inseguro, vulnerable y miedoso. Ahora empezaba a tener ese plus de
agresividad en el campo, la testosterona supongo. Y añadiendo todo lo que había
aprendido durante los años daba como resultado a un defensor decente.
Empezaba
una temporada en la que jamás sospecharía que llegase a ser uno de los
jugadores clave del equipo, ya no por calidad técnica, que no la tengo, sino
por mi regularidad. Y es que si algo he tenido en el fútbol es regularidad, más
allá de capacidades técnicas, tácticas o físicas.
A final de
temporada todo esto se vería recompensado con el trofeo al jugador más regular,
en una liga que ganamos. Y lo digo bien orgulloso, porque hasta algunos
compañeros me felicitaban después de los partidos y eso no tiene precio...
