lunes, 28 de octubre de 2013

Interludio III - El hombre de bien (parte segunda)




The xx - Reconsider (Jamie xx Remix)

 




¿Porqué decidimos ser más o menos buenos? ¿Nacemos o nos hacemos buenos o malos? ¿Es genético o viene dado por la experiencia? No sé si llegaremos a saberlo alguna vez, porque son tantas las influencias que a saber cuál es el punto de inflexión.

Yo, personalmente, creo que he tenido mucha suerte en cuanto a las influencias. Llega un momento en el que la personalidad propia te guía, pero hasta ese punto te pueden influir mil cosas. Y digo suerte pero, ¿realmente ha sido suerte?¿No he elegido yo a las personas con quien juntarme aunque fuese pequeño? ¿O son los valores que te inculcan los que te hacen elegir a esas personas? ¿qué fue antes, el huevo o la gallina? Y digo suerte pero, ¿realmente es bueno llegar a ser bueno? ¿o es sólo que está bien visto?

De lo que no tengo dudas es que las experiencias te forman el carácter. Puedes tener una base e ir cambiando poco a poco según lo que vayas viviendo porque, ojo, las personas CAMBIAN. Eso no significa que sea ni malo ni bueno, sino que se adaptan a lo que se van encontrando. Porque hay que diferenciar el carácter de la persona, de la personalidad.

Igual que a veces nos comportamos de maneras distintas según con quién estemos. ¿Eso nos convierte en falsos? ¿O simplemente es que nos adaptamos al carácter de quien tenemos enfrente? Y esta adaptación, ¿es por miedo al rechazo? Aunque también hay personas que directamente se consideran libres y son siempre iguales. ¿Son poco empáticos o sólo desconsiderados? ¿Y en qué sentido son libres?

Lo que tengo muy claro es que las personas nos hacen cambiar. Ya sea para bien o para mal, nos vamos transformando continuamente en personas más complejas, con más experiencia. Y os digo una cosa: por delante de las personas que me han cambiado, me cambian o me cambiarán, estarán las personas por las que yo quiera cambiar.

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