Mi padre siempre ha sido un amante de la música y en gran parte le debo mi gusto a él. Lo recuerdo en el “estudio”, que en realidad era un cuarto con un ordenador (un Amstrad), estanterías con libros y una mesa de dibujo enorme que hacía 4 antonios. Justo encima de la mesa había una estantería con tomos de “Zona 84”: libros, en su mayoría, recopilatorios de revistas de ciencia ficción. Aquellos libros me los tenían prohibidos (por algo estaban tan lejos de mi alcance) porque eran para mayores de edad…
Esta vez no puedo decir que la canción me gusta. Me parece un poco repetitiva. Eso si ya sabes que me encanta el gusto de tu padre por los libros.
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